Abans que l'Àngel Gabilondo (filòsof i metafísic i també poeta) fos ministre, jo ja coneixia els seus escrits i llibres.
Del llibre "Contigo", que prenc quan tinc petites estones per llegir algun dels breus textos que contè, us transcric un fragment inspirador de l'article "Empezar de nuevo".
Trobareu una manera poètica i subtil de plantejar-nos alguns dels aspectes que treballem amb un altre vocabulari (objectius, flexibilitat, coherència...) i un altre enfocament, més hard, en els cursos de Gestió del Canvi.
Allà va:
Suele decirse que es bueno empezar de nuevo. Supongo que tiene sus inconvenientes. Tampoco es previsible ni deseable que, instaurado un inicio para siempre, ya no haya posibilidad alguna de reorientarse. No está claro, en todo caso, que sea lo mismo empezar que reanudar. Las huellas de lo vivido como rastros de memoria son también cuerpo propio y forman parte de lo que somos. No parece fácil, ni siquiera tal vez posible, recuperar el primor de lo primordial. Aunque brote con la máxima limpieza, lleno de sentido y de verdad, siempre pervive incluso lo borrado. Tal vez sea entonces mejor reconocer que sólo cabe la novedad asumiendo que para uno mismo ya no hay más nacimiento. Pero quizá haya amanecer. Conviene despertarse sin dejar de ser quien anocheció con el día pasado. Al menos, no del todo. Buscamos revivir.
Lo pasado nos pasa y nos acompaña. Muchas veces en silencio, pero es nuestro, tanto como a la vez ya no nos pertenece. Somos, en cierto modo, lo que hemos vivido. Pero no sólo. También lo que buscamos y lo que perseguimos. Por eso, puestos a empezar otra vez, es importante reconocer los pasos, y no sólo para no repetirlos sino para, en su caso, darles más consistencia y alcance. No pretendemos dejar por concluidos ni nuestros inicios. Una y otra vez reescribimos un pasado para que nos impulse en otras direcciones y nos ofrezca nuevas perspectivas.
